Recolectamos y rescatamos alimentos a través de un intercambio de servicio; es decir, a las diferentes empresas de alimento, mercados, restaurantes y agricultores, con los cuales se trabaja, se les ofrece un servicio logístico inmediato evitando que incurran en gastos de dinero y tiempo para que se deshagan del alimento que ya no es comercializable debido a que no cumple con sus propios estándares de calidad. Este alimento usualmente tiene alguna falla estética, falla en el envase o simplemente tiene una fecha de vencimiento cercana. Para posteriormente redistribuirlo de manera inmediata a la población beneficiaria (centros de atención a niños, ancianos, mujeres, familias, comedores populares y OTBs vulnerables). Se realiza un seguimiento a los beneficiarios con el fin de garantizar el consumo óptimo del alimento entregado y un acompañamiento nutricional para hacer visible el impacto generado. Actualmente, contamos con más de 15000 beneficiarios constantes cada mes.